Se fue el dt... ¿Y el fútbol?

El fútbol? Sigue sin aparecer. En un partido chato, sin mucho vuelo futbolístico, Fénix volvió a empatar, esta vez, con el modesto equipo de Bodega.
Sin poder lograr aun esa tan ansiada "identidad de juego". Sin ni siquiera insinuar una idea de juego colectivo, asociado, algo que nos aproxime un poquito (aunque sea) al nivel de juego que se requiere para alcanzar la primera división, volvimos a empatar, y en esta oportundiad, en cero.
Más allá de las conocidas dificultades que se nos presentan para peligrar en el arco rival (tales como la falta de ruedo futbolístico, la falta de sencillez a la hora de jugar -vale decir, de hacer "la más fácil", como también así la anteriormente mencionada "crisis de identidad de juego") pudimos aproximarnos al area rival y hasta pudimos haber convertido el gol de la victoria. Pero para revalsar el vaso, también fallamos en la definición.
Era un partido para ganar, para despegarse del pelotón de abajo, y aproximarnos a la clasificación. Nada de eso sucedió y envueltos en un nerviosismo generalizado terminamos el partido con Apu (si, el más alto de la defensa) patiando la última pelota de un tiro de esquina. Asi está Fénix señores. Sin fútbol. Sin ideas.
Todavía falta muchan fechas, y mucho por corregir. A diferencia de torneos anteriores, donde arrancabamos creyendonos los mejores, en este, tuvimos serios golpes al autoestima desde el inicio. Ojala, podamos aprender, y con humildad, mejorar este triste presente que tiene (estrictamente) el fútbol de Fénix. Digo estrictamente el fútbol, porque un mal rendimiento indvidual, colectivo, un mal resultado del partido, debe ser charlado en la cena de miercoles con la idea de poder mejorarlo. Pero de ninguna manera debe afectar las relaciones amistosas de nuestros jugadores.
Nos falta mucho para jugar como queremos. Faltan muchas fechas, falta... pero se puede cambiar, estamos a tiempo.